Género: Fábula, infantil
Creado en: Agosto, 2007
Tut era un conejo que amaba las zanahorias e iba a su primer día de clases, quería encontrar un amigo con el cual compartir ese gusto. Entró a la escuela del bosque y observó muchos animales, era tiempo de buscar a otro conejo para hacer amistad. Entonces, Tut encontró un conejo negro.
-Hola, ¿te gustan las zanahorias? –preguntó Tut.
-No, sólo como lechuga –contestó.
Triste, fue a buscar a algún otro conejo… pronto encontró uno amarillo.
-Me gustan las zanahorias ¿Y a ti?
-No, sólo me gustan las calabacitas.
Pensando que tendría mejor suerte, fue con una conejita rosa.
-Dime que te gustan las zanahorias… -preguntó Tut desesperado.
-No, sólo me gustan las manzanas.
Y así Tut les preguntó a todos, pero nadie comía lo mismo. Entonces, un alumno diferente se le acercó y preguntó.
-¿Por qué no me preguntas si me gustan las zanahorias? –dijo el Lobo.
Emocionado por encontrar un nuevo amigo, Tut le preguntó:
-¿Te gustan? Yo las amo.
Y el lobo contestó…
-No, pero sí me gustan los conejos que se las comen.
Parecía que era el principio de una linda y corta amistad…
-Hola, ¿te gustan las zanahorias? –preguntó Tut.
-No, sólo como lechuga –contestó.
Triste, fue a buscar a algún otro conejo… pronto encontró uno amarillo.
-Me gustan las zanahorias ¿Y a ti?
-No, sólo me gustan las calabacitas.
Pensando que tendría mejor suerte, fue con una conejita rosa.
-Dime que te gustan las zanahorias… -preguntó Tut desesperado.
-No, sólo me gustan las manzanas.
Y así Tut les preguntó a todos, pero nadie comía lo mismo. Entonces, un alumno diferente se le acercó y preguntó.
-¿Por qué no me preguntas si me gustan las zanahorias? –dijo el Lobo.
Emocionado por encontrar un nuevo amigo, Tut le preguntó:
-¿Te gustan? Yo las amo.
Y el lobo contestó…
-No, pero sí me gustan los conejos que se las comen.
Parecía que era el principio de una linda y corta amistad…